Declaración institucional
Día Nacional de las Lenguas de Signos Españolas 2023
Las personas sordas tienen derecho a disfrutar de una vida plena. A participar como iguales en la actividad económica, social, política y cultural de nuestro país. A contar con las mismas oportunidades sanitarias, educativas y laborales que el resto. Las personas sordas tienen derecho a tener derechos.
Y para eso son indispensables las lenguas de signos. En las familias, en las escuelas, en los espacios de ocio, en los medios de comunicación, en los servicios públicos… Allí donde haya una persona sorda deben estar sus lenguas como única garantía de accesibilidad lingüística. Porque los derechos lingüísticos son la puerta a través de la cuál la ciudadanía sorda accede al resto de derechos. Porque sin las lenguas de signos no los pueden ejercer.
La promulgación de la Ley 27/2007 supuso un gran avance en los derechos de este colectivo que se fueron consolidando y fortaleciendo a lo largo de sus casi dieciséis años de vigencia. Con todo, no es suficiente. No sin actos de aplicación específicos que aseguren su cumplimiento de forma igualitaria en todo el territorio español, y contribuyan a que esta norma sea bien conocida y utilizada.
Por todo el expuesto, con motivo del Día Nacional de las Lenguas de Signos Españolas, la Confederación Nacional de Sordos de España y su red asociativa (entre ellas, la Federación de Asociaciones de Personas Sordas de Galicia) quieren recordarnos a enorme trascendencia que las lenguas de signos tienen en la construcción de nuestros proyectos vitales.
Y, como tal, hacen un llamamiento a las distintas administraciones a tomaren conciencia de que el progreso humano de las personas sordas, su plenitud y autorrealización, pasa por atender sus necesidades y demandas respecto al desarrollo efectivo de sus derechos lingüísticos, por situar las lenguas de signos en el eje de cualquier política pública, y por normalizar su uso como una lengua más.
Es preciso acabar con las situaciones de aislamiento y privación lingüística que, desde edades tempranas, amenazan el ejercicio de su libertad, su dignidad y su ciudadanía. Es preciso garantizar el rigor lingüístico y la calidad de las lenguas de signos en el acceso a la información de las personas sordas y sordociegas. Es preciso fomentar la protección de las lenguas de signos y equipararlas al resto de lenguas orales.
El Parlamento de Galicia se une a la reivindicación para que el Reglamento por lo que se desarrolla la Ley 27/2007 vea por fin la luz. Y con eso, el derecho para enseñar y aprender las lenguas, también las lenguas de signos. El derecho para elegir estas lenguas sin que se penalice, ni discrimine por hacerlo. O, sencillamente, el derecho para comunicarse.
LENGUAS DE SIGNOS PARA UNA VIDA PLENA.
Santiago de Compostela, 14 de junio de 2023