Santiago, 13 de septiembre de 2008.- El portavoz de Pesca del Grupo Parlamentario Popular de Galicia, José Manuel Balseiro, felicitó hoy a la Guardia Civil por la reciente operación contra el furtivismo y la comercialización ilícita de vieiras con toxina, y apuntó que la proliferación de estas actividad es una consecuencia directa de la parálise en la que está sumido el Servicio de Inspección Pesquera de la Xunta de Galicia.

En una rueda de prensa ofrecida en la sede del Parlamento de Galicia, el diputado popular anunció que interpelará a la consejera de Pesca por considerar que ella es la responsable política directa del sucedido, en la medida en que la ausencia de actividad inspectora se traduce en un incremento del furtivismo que, en ocasiones, como aconteció en la Ría de Ferrol, campan a sus anchas. De hecho, los profesionales que se dedican al marisqueo respetando las normas en vigor tienen advertido que la captura de vieiras con toxina en la Ría de Ferrol no se habría producido se existiera un servicio de vigilancia eficaz, dotado con los medios acomodados.

Sin embargo, la realidad demuestra que el Servicio de Guardacostas de la Xunta –del que dependen los medios humanos y materiales de inspección y vigilancia pesquera-  está prácticamente desmantelado desde comienzos de la actual legislatura y prueba de eso es que el 90% de sus embarcaciones están amarradas a puesto desde octubre de 2006.

No pasado, y para evitar situaciones como la que ven de salir a la luz la raíz de la operación contra la comercialización de vieira con toxinas, los responsables de la Consejería de Pesca gobernada de aquella por el PPdeG tenían habilitados dispositivos de protección de los recursos que incluían la incorporación de embarcaciones de vigilancia en las rías durante las 24 horas del día y a lo largo de varios meses. Balseiro Orol instó a la Consejería de Pesca a que ponga en marcha una estrategia similar y que destine los medios humanos y materiales necesarios a los lugares en los que está repuntar la actividad marisquera ilícita.

Balseiro Orol fijo un llamamiento al conjunto de la sociedad, desde los consumidores domésticos ata el sector de la hostelería, para que rechacen cualquier producto procedente de la extracción furtiva, en la medida en que esas prácticas no solo vulneran la normativa, sino que entrañan serios riesgos para la salud de las personas que ingieran marisco procedente de canal ilícitos.

Recordó también el diputado que frente a la “inacción el “silencio clamoroso” del Gobierno bipartito, el anterior Ejecutivo del PPdeG promovió la realización de numerosas campañas de concienciación social contra el furtivismo para alertar a la población y a los profesionales de la hostelería de los riesgos –mortales, en ocasiones- derivados del consumo del marisco procedente del furtivismo. De manera simultánea la esas campañas, también entonces, la Xunta se mantuvo inflexible, con vigilancia constante, inspecciones continúas y sanciones elevadas para disuadir a los infractores.

“Desgraciadamente, nada de esto se tiene hecho en los tres años de Gobierno bipartito y, a cuyo objeto, las consecuencias afloran ahora con toda su intensidad, pero también con el riesgo añadido de provocar graves daños a la imagen de calidad conseguida por el marisco y la hostelería gallega después de años de esfuerzo”, agregó Balseiro.

El portavoz de Pesca de los populares gallegos lamentó también la pasividad mostrada por la Consejería del ramo, que tardó en salir en defensa del sector que se dedica a la extracción de viera de manera legal, a pesar de que en su día había recibido incluso los elogios de la Comisión Europea por la eficacia y el rigor de sus planes de explotación.